
El corrector líquido es un invento de la década de los años cincuenta que supuso una revolución en el sector de la papelería y el material de oficina. Su capacidad para tapar errores en textos escritos sobre papel o soportes similares hicieron que rápidamente se extendiera su uso, hasta llegar a convertirse en un elemento esencial en cualquier oficina.
La goma de borrar también supuso un gran avance, ya que podían borrarse marcas hechas con lápices de grafito, y más adelante, de lápices de colores.
Más adelante se inventó también el corrector en cinta, que corrige en seco. Éste tiene más ventajas cuando se quiere corregir textos largos y en línea recta.
A pesar de que la marca Liquid Paper fue una de las primeras en comercializar el corrector líquido, rápidamente aparecieron otras como Paper Mate, Pritt o Tipp-ex y tuvieron mucho éxito, hasta el punto de que el nombre de esta última marca se ha utilizado para designar al producto en general.
Este tipo de corrector es siempre líquido y suele contener 8 ml. de capacidad. Tiene la gran ventaja de que el líquido se dispensa fácilmente y que la punta, normalmente metálica, permite una gran precisión, sobre todo para errores muy pequeños. Al ser líquido, hay que esperar a que se seque para volver a escribir sobre la corrección.
Este tipo es el corrector en seco, que permite escribir encima al instante y que es ideal para corregir errores en línea recta, ya sea en horizontal, vertical o diagonal.
La cinta correctora suele tener un grosor de entre 4 y 8,4 mm. y una longitud de de entre 8 y 12 metros. Actualmente muchos correctores en cinta tienen la estructura transparente para poder controlar el nivel de carga. Además, algunos ya incorporan un tapón para proteger la punta e incluso un tornillo de retroceso para tensar la cinta.
Es el corrector en frasco conocido como tipp-ex, por el nombre de una de las marcas que empezó a comercializar el corrector líquido. Suele tener una capacidad de 20 ml y cuenta con un pincel o goma en forma triangular cuya función es extender el corrector.
Permite mucha precisión en la corrección pero hay que esperar a que se seque para volver a escribir encima.
La goma de borrar es un corrector con el que se eliminan trazos generalmente de lápiz, aunque también se utilizan para algunos tipos de tintas. Existen muchas marcas de gomas de borrar, cada una con unas características diferentes:
- Goma Milan: Se usa normalmente para lápices de grafito. Existen varios modelos, como la Milan 430, la Milan Nata 624 con banda de celofán y la Milan Nata 612 con cantos biselados.
- Goma Pelikan: Es una goma de borrar mixta para todo tipo de superficies y que se utiliza para lápices, lápices de colores, tinta estilográfica, tinta china, bolígrafos e incluso máquina de escribir.
- Goma Staedtler: Es una goma de plástico para lápiz de grafito y de color sobre papel y poliéster.
- Goma Faber-Castell: Se utiliza para borrar marcas de lápices de grafito y lápices de colores, así como para cera.